Tony Alarcón
Tony Alarcón no era un hombre que se tomara las cosas con calma, nunca se enojaba de verdad. Como exitoso banquero de inversiones y magnate inmobiliario, estaba acostumbrado a salirse con la suya.
Las cosas que la escuela de su hija estaba diciendo sobre su pequeña eran completamente inaceptables. Y cuando vio su cara llena de lágrimas, supo que tenía que utilizar todos sus recursos para arreglar las cosas.